Voltimum, el portal lider de información para los profesionales del sector eléctrico publica la guía para la elección de los SAI.
Muy a menudo, a los SAI se les solicita la comunicación a distancia, para permitir un diagnóstico más rápido y eficaz y rápidas intervenciones de mantenimiento en las diferentes fases de funcionamiento. Estas funciones se pueden obtener dotando a los equipos con tarjetas de comunicación y de red, y ofreciendo servicios adicionales de supervisión, para garantizar la máxima seguridad y tranquilidad al cliente.
PROTECCIÓN LOCAL
Para la protección de un ordenador individual (server o puesto de trabajo) y de los periféricos correspondientes es suficiente con utilizar una conexión RS232 o bien USB e instalar el software de gestión en el sistema que se debe proteger.
Si el ordenador está conectado a una red IP, también es posible recibir en el ordenador mismo las señalizaciones de alarma del SAI mediante mensajes e-mail y pop-up, y visualizar gráficamente los datos operativos, mediante programas de monitorización específicos.
La ventaja de este tipo de gestión reside en que los costes de implementación son muy bajos; pero implica un límite: el SAI debe ser colocado cerca del sistema a proteger.
EXTENSIÓN DE LA PROTECCIÓN LOCAL
En caso de un número de ordenadores mayor a controlar, es posible utilizar la solución descrita Anteriormente, instalando en los demás ordenadores un «agent» software especial, que recibirá y efectuará los mandos enviados por el ordenador interconectado con el SAI.
También en este caso, los costes de implementación son muy bajos; pero después de una desconexión del ordenador interconectado con el SAI (por avería, mantenimiento, actualización, etc.) se inhibe completamente el sistema de gestión y, como consecuencia, no se puede recibir las señalizaciones de alarma, poniendo en riesgo la integridad de los ordenadores restantes.
INTEGRACIÓN A LA RED IP
Este tipo de instalación prevé que el SAI esté conectado a una especie de interfaz de red en cuyo interior está instalado el software de gestión.
A su vez, la tarjeta de red está conectada a la red IP.
Siendo que el SAI está conectado directamente a la red IP, su sistema de gestión puede enviar e-mail y mensajes pop-up, apagar y reencender el ordenador.
La protección de los diferentes ordenadores está garantizada al instalar en ellos un agent software que recibe los mandos de la interfaz de red del SAI.
Las ventajas de esta solución son numerosas:
- El SAI puede ser instalado incluso lejos de los sistemas que debe proteger
- La gestión completa ya no depende de un solo ordenador, garantizando de hecho la seguridad de todos los dispositivos conectados
- La visualización de los datos es posible desde cualquier browser WEB sin la necesidad de instalar un software dedicado